Antena 3 sigue apostando por la ficción seriada para su programación. Próximamente podremos ver en la cadena las adaptaciones del libro "Apaches" de Miguel Sáez Carral y de la película "Perdiendo el norte", que el grupo Atresmedia produjo, buscando alcanzar el mismo éxito que lograron tres de las cuatro series ("Bajo sospecha", "Allí abajo" y "Vis a vis") que estreno en la temporada pasada.
Anoche volvió a conseguirlo. El primer capítulo de "Mar de plástico" otorgó a Antena 3 un 23,6% de cuota de pantalla en su franja horaria, lo que se traduce en más de 4 millones de espectadores. Sin embargo, como ya hiciera con "Allí abajo", Atresmedia emitió el episodio en simultáneo en el resto de cadenas del grupo (excepto LaSexta), por lo que el resultado es mayor si sumamos los datos que lograron Neox (320.000 espectadores y 1,9%), Nova (372.000 y 2,2%) y Mega (257.000 y 1,5%). En total, cerca de 5 millones de espectadores (29,2% de share)* siguieron el estreno de esta serie.
"Mar de plástico" sigue la investigación del asesinato de una chica en unos invernaderos al sur de España. Protagoniazada por un brillante Rodolfo Sancho, que interpreta el papel de Héctor, un exmilitar que se encargará de dirigir la búsqueda del asesino. Con un registro muy distinto al papel de Julián en "El ministerio del tiempo", nos encontramos con un personaje más serio y frío, propio al de un guardia civil (y no como los de "Olmos y Robles", que anoche perdió casi 5 puntos de share).
En contraposición, encontramos a Lucas, novio de la chica asesinada y el principal sospechoso del capítulo de anoche, interpretado por un inexpresivo Jesús Castro. El interprete de "El niño", apenas destacó en su actuación, con frases no muy complejas e interpretadas todas de la misma forma.
Al igual que en "Vis a vis", encontramos en el elenco algunas caras distintas de las habituales, destacando especialmente algunos actores extranjeros, ya que la acción se ambienta en un pueblo lleno de inmigrantes. Esto es un punto positivo para la producción, pues pocas series españolas incluyen en su reparto a tantos personajes de distintas nacionalidades (anoche vimos africanos, rusas, etc.).
En esta nueva serie, encontramos una factura visual muy cuidada, en la que se repite la tendencia de abandonar los platós para grabar en localizaciones reales. Pasamos de la fría fotografía de "Vis a vis" a una calidez que nos evoca la Andalucía más árida (la serie fue rodada en Almería). Pero lo que más llama la atención, personalmente, son esos planos cenitales en los que se nos muestra ese "mar de plástico" que forman los invernaderos.
En cuanto al argumento, volvemos a encontrarnos una trama de asesinato e investigación policial como vimos en "Bajo sospecha". Además, la serie tiene puntos en común con la mítica "Twin Peaks". En la secuencia en la que el protagonista encuentra el cuerpo de la chica, vimos una escena que recordaba al momento en el que se encuentra el cuerpo de Laura Palmer en la serie de David Lynch. Sin embargo, lo interesante del guion es el evidente mensaje que hay detrás de la historia: las condiciones de la inmigración. Desde la desesperación de los extranjeros por encontrar una oportunidad laboral hasta los ataques xenófobos.
Espero que la serie mantenga unos buenos datos a lo largo de la temporada, ya que es una propuesta interesante. Aunque cuesta pensar en una segunda temporada si terminan esta con la resolución del caso. Habrá que esperar a la próxima semana para ver la verdadera acogida de la serie.
Hasta entonces, un saludo.
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